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Las enfermedades periimplantarias son las patologías inflamatorias de origen infeccioso que se produce alrededor de los tejidos que rodean un implante.

Hoy te contamos todo lo que tienes que saber sobre ellas.

¿Qué estadios de la enfermedad periimplantaria existen?

Las enfermedades periimplantarias son un problema muy frecuente. Según los últimos estudios, al menos uno de cada cuatro pacientes que tienen un implante dental (un 24%) desarrollan periimplantitis a medio plazo -alrededor de 9 años-. En este caso es de suma importancia la prevención y el diagnóstico precoz que puedan evitar la pérdida del implante. Existen dos estadios en la enfermedad periimplantaria:

  • Mucositis periimplantaria: es el grado inicial de la enfermedad, similar a la gingivitis, pero en este caso alrededor de los implantes. Se caracteriza por la inflamación de la mucosa, pero no está comprometido el hueso de soporte.  Si se trata de un modo adecuado hay muchas probabilidades de que la situación sea totalmente reversible.
  • Periimplantitis: Si la mucositis no se trata correctamente o no se detecta, puede extenderse y afectar al hueso que rodea al implante. Esta situación es más complicada porque en función del grado de pérdida ósea el implante puede ver comprometida su supervivencia a corto plazo.

¿Cómo saber si tienes una enfermedad periimplantaria?

Para saber si padeces una enfermedad periimplantaria tienes que estar atento a algunos de estos síntomas. Te los resumimos aquí:

  • Enrojecimiento de los tejidos que rodean al implante.
  • Sangrado
  • Movilidad del implante.
  • Dolor en la zona.

¿Cómo se tratan las enfermedades periimplantarias?

El objetivo principal del tratamiento es detener el daño que se ha producido en las zonas que rodean el implante. Para ello, lo primero que hará tu especialista es controlar la infección bacteriana.

Para tratar esta infección, en estadios iniciales, se plantea un tratamiento no quirúrgico eliminando la inflamación de los tejidos periimplantarios.

En los casos en los que se haya detectado pérdida ósea habrá que realizar tratamientos complementarios.  Según el estado de la cavidad oral y del grado de periimplantitis se puede dar un tratamiento antibiótico o quirúrgico. Pero debe ser tu odontólogo quien decida cuál es el mejor tratamiento en tu caso.

Una vez realizada la intervención, deberás tener una serie de precauciones o incluso algún cambio de hábito: así, si fumas deberás dejarlo y debes aprender a limpiar adecuadamente los implantes después de cada comida con constancia y de manera exhaustiva.

¿Por qué se inflaman los tejidos que rodean el implante?

La boca es una de las zonas de nuestro cuerpo con más riesgo de sufrir infecciones. En ella se encuentran una gran cantidad de bacterias por lo que es imprescindible tener especial cuidado.

En el caso de que te hayan colocado un implante, tienes que procurar mantener libre de infecciones el hueso que lo soporta. Para lograr este objetivo, las medidas de higiene y control de la placa son fundamentales.

Si esta higiene no es adecuada y si además se dan otros factores como el tabaquismo, la genética, antecedentes previos de periodontitis, diabetes mal controladas, la posibilidad de desarrollar enfermedad periimplantaria aumenta considerablemente.

Por lo tanto, la prevención con una higiene dental correcta y minuciosa y revisiones periódicas es imprescindible para evitar estas enfermedades o, al menos, para que tu dentista la diagnostique en las primeras fases para poder curarla más rápidamente. Sin duda, la clave para evitar esta enfermedad es la prevención.

¿Y tú?  ¿Te han colocado un implante y notas alguno de los síntomas que te hemos descrito?

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